18/07/2025 Viernes 15 (Mt 12, 1-8)
- Angel Santesteban
- hace 5 horas
- 2 Min. de lectura
Si comprendierais lo que significa quiero misericordia y no sacrificios.
Un sábado, los fariseos se acercan a Jesús escandalizados porque han visto a los discípulos arrancar y comer espigas, cosa prohibida en sábado. El virus del fariseísmo prefiere los espíritus formales y serios, como el del hermano mayor del pródigo. Es un virus que se detecta fácilmente ya que tiene una fuerte tendencia a rasgarse las vestiduras ante los pecados ajenos. El Papa Francisco dice que el contaminado por el virus del fariseísmo se escandaliza de cualquier apertura, de cualquier cosa que no entre en sus esquemas mentales o espirituales, de cualquier caricia o ternura que no corresponde a su forma de pensar y a su pureza ritualista.
Para Jesús, la persona humana está por encima de todo, también de la ley. Se ha hecho hombre para que tengamos una buena vida, vida en abundancia. Una ley es buena o mala según ayude o no ayude al mejor bienestar humano. Todo su empeño es que tengamos vida en abundancia, en plenitud. Para los fariseos y los contaminados por el virus fariseo, lo primero es la ley. Deificando la ley, olvidan al ser humano; olvidan incluso a Dios.
Tengamos las antenas del espíritu bien desplegadas para detectar pronto la presencia del virus del fariseísmo; es el mayor de los enemigos del Evangelio de Jesús.
Si comprendierais lo que significa quiero misericordia y no sacrificios.
Lo dice como quien ha perdido toda esperanza de que esas personas tan religiosas y serias comprendan que lo básico y fundamental de la verdadera religión es la misericordia. La mejor sintonía con Dios es la de quien vive la misericordia. Por eso que la misericordia es la ley suprema. La misericordia triunfa del juicio (Sant 2, 13).
Comments