top of page
Buscar

23/08/2024 Viernes 20 (Mt 22, 34-40)

Amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma y con toda tu mente. Este es el mayor y el primer mandamientos. El segundo es semejante a éste: Amarás a tu prójimo como a ti mismo.

Los judíos, con razón, estaban orgullosos de su religión. Dios mismo, por medio de Moisés, había escrito sobre piedra su voluntad; tenían claro lo que debían hacer para mantenerse fieles a Dios. Pero llegó Jesús y el protagonismo de la ley de Moisés desaparece: El tiempo se ha cumplido y el reino de Dios está cerca; convertíos y creed en la Buena Nueva (Mc 1, 15).

Jesús enseña que el amor está por encima de la ley; que lo que Dios quiere no es tanto que guardemos la ley, sino que amemos. Carece de sentido la ley que no proviene o no conduce al amor. San Pablo dice que la ley fue nuestro pedagogo hasta Cristo… Mas una vez llegada la fe ya no estamos bajo el pedagogo (Gal 3, 24).

El segundo es éste: Amarás a tu prójimo como a ti mismo.

Nadie le ha pedido el segundo mandamiento. Pero lo asocia al primero; los hace inseparables: No hay mandamiento más importante que éstos. El amor a Dios que excluye al prójimo es una mentira. Por otra parte, tampoco es que Jesús confunda los dos mandamientos: La preeminencia total es de Dios. Nuestra salvación viene de Él, no de los prójimos. Un autor actual escribe: Amar a Dios con todo el corazón es para Jesús amar a un Padre que ama sin límites a todos sus hijos. Por eso no es posible amar a Dios sin desear lo que Él quiere y sin amar a quienes Él ama tanto.

0 comentarios

Entradas Recientes

Ver todo

25/11/2024 Lunes 34 (Lc 21, 1-4)

Sabed que esa pobre viuda ha echado más que nadie. Pasa desapercibida. Por ser mujer, por ser mayor, por ser viuda, por ser pobre. Es una...

Commentaires


bottom of page